Las edificaciones barrocas y todo lo construido es de color terracota, como lo son las ciudades meridionales, sin embargo el puente Carlos Praga tiene forma gris para despistar al enemigo. Aún así, se construyen piñas de pino de cristal para alcanzar eternidades. Esas mismas, como un corazón de espejo, se opacan ante el neohueso formado en torno a las barras de titanio.